¿De cuánto debería ser el próximo aumento a estatales?
Los números de septiembre de la inflación, lo que dijo Quintela y la negociación con los docentes que deja un mensaje. Un texto lleno de números, pero que de fondo esconde un gran problema social: la inflación no cede y la pérdida de poder adquisitivo se siente cada día más. Por Mattías Meragelman.
En país donde la incertidumbre es la regla y la certeza la excepción, la economía regala por estos días una sola definición tajante: si el Gobierno provincial no aplica un nuevo incremento salarial, l@s trabajadores estatalesterminarán el 2022 perdiendo poder adquisitivo.
Con el último aumento otorgado por la administración de Ricardo Quintela, el salario mínimo de un emplead@públic@ provincial de planta pasó de estar en $38.300 en diciembre del 2021 a $69.500 en este mes de octubre. De esa manera, si no existiera una nueva suba, terminaría el año con una modificación positiva del 81,4%.
Mientras tanto, con los datos de septiembre que se conocieron el viernes, la inflación lleva en los primeros nueve meses del año un acumulado del 67,8% en La Rioja. Pensando en los tres meses que faltan, ya casi ningún economista se anima a vaticinar que cierre el año por debajo del 85%.
Al Gobierno provincial le conviene cuando la comparación se realiza por porcentajes y lo perjudica al concretarla por valores nominales.
La Canasta Básica Total (CBT) se ubicó en La Rioja en $131.600 en el mes de septiembre. Si se toma en cuenta que en diciembre de 2021 la canasta se encontraba en $77.869, se advierte que tuvo un incremento de $53.731 (más que la suba del salario mínimo estatal).
Nadie en la Casa de Gobierno niega el problema y tod@sreconocen al aumento de precios como el gran tema de los próximos meses. Inclusive, teniendo muy claro su impacto en el proceso político que se avecina.
Fue el propio gobernador Ricardo Quintela quien hace diez días afirmó ante la prensa: «En noviembre tendremos que volvernos a sentar si se mantiene el proceso inflacionario. Lo que estamos haciendo es que cada ministerio sepa que tendremos que esperar o ralentizar algunos programas para atender el proceso inflacionario. No estamos pensando en un bono», sostuvo el mandatario provincial.
En ese mismo sentido, esta semana el Gobierno hizo la oferta salarial a l@s docentes y la mayoría de los gremios la rechazaron públicamente. Sin embargo, el debate también dejó otro dato interesante y que grafica el momento económico: AMP no quiso discutir todavía la paritaria del próximo año.
La decisión la hizo explícita el propio secretario general,Rogelio De Leonardi, en “Riojavirtual Radio”. “No vamos a permitir discutir ahora los aumentos de enero y febrero, solamente estamos hablando de los dos meses y medio que quedan del año. Hoy no podés plantear un aumento para tres o cuatro meses, casi que deben ser mensuales los aumentos”, detalló en relación al proceso inflacionario y la imposibilidad de proyectar en el tiempo.
Este texto tiene muchos números y puede tener diversasexplicaciones, pero la realidad es una sola: si los salarios aumentan menos que la inflación, la gente puede comprar menos productos, pierde poder adquisitivo y baja su nivel de vida.
Hay una parte de esta tensión económica/social que el Gobierno provincial no puede controlar porque la inflación se determina por múltiples causas, la mayoría de las cuales no se definen en La Rioja. La parte que si le corresponde a la administración riojana de manera directaes la de los sueldos, que es la que la población vive como más concreta y cercana a su día a día.
¿El aumento tiene que ser en noviembre previendo cuánto puede cerrar la inflación en los meses siguientes? ¿El incremento debe otorgarse en diciembre para estar segurosde no perder frente al aumento de precios? ¿Un bono no es una opción? ¿De cuánto debe ser la suba? ¿De cuánto será la inflación en el último trimestre del año?
“Nosotros mantenemos el compromiso de que los salarios estén por encima de la inflación”, afirmó en los últimos días una figura central del Gobierno. En los próximos días75 días quedará claro si pueden mantener esa aseveracióno no.
Se viene un último trimestre del año que será tenso en términos salariales y que definirá el humor social en elarranque del 2023 (que es electoral).
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